Sic et Non

26 de octubre de 2012

Breve análisis de las elecciones gallegas





En una columna como esta, dedicada a la política, no debería faltar un sesudo análisis sobre los resultados de las recientes elecciones del 21 de octubre. Podría decirse que eran unos resultados esperados en cuanto a ganadores y perdedores, aunque sí que nos cogió a muchos desprevenidos en cuanto a las cifras concretas de diputados logrados por el PP y AGE.

Pero en vez de explicar a toro pasado lo ocurrido, lo cual siempre es más fácil, me apetece aprovechar este espacio para reflexionar sobre el futuro, concretamente, el porvenir de los cuatro partidos que ahora representarán a todos los gallegos y gallegas en el Parlamento autonómico.

Sin duda, quien lo tendrá más complicado será el BNG. Ha recibido un duro castigo y además, su ahora reducido peso parlamentario provocará su ausencia en un buen número de instituciones con importante peso político. Pero mal harían en explicar como única causa de su pérdida de votos, la irrupción de Beiras.

Más bien se trata de un proceso de pérdida de peso electoral que viene durando muchísimos años, y al que este veterano político vino a poner la puntilla. Tal vez, en esta crisis, emerja una oportunidad para realizar los cambios necesarios que logren recuperar la sintonía con la ciudadanía.

En cuanto a Alternativa Galega de Esquerda, me suscitan dudas cómo será la coexistencia entre los diputados de Anova y de IU, máxime cuando estos últimos han obtenido mucha más representación de la que hubieran logrado de concurrir ellos solos a los comicios gallegos.

Deberán aprovecharse de la arrolladora personalidad de Beiras, como ya han hecho exitosamente en la campaña. Sin duda ensombrecerá al resto de la oposición y se convertirá en el lider de esta. Pero su gran reto, será encontrar un discurso parlamentario propio, que no se sustente solo en la crítica y en la protesta continua.

Los socialistas tampoco lo tienen fácil, el partido está divido, máxime ahora tras la gran derrota electoral, que pone a Pachi Vázquez al pie de los caballos. Su liderazgo está más discutido que nunca, y es lógico, puesto que parte de la culpa la ha tenido su falta de carisma y de proyección entre los gallegos.

Se abre una importante reflexión y preocupa ver en el PSOE discursos exculpatorios, u otros mensajes en los que se dice que se toma nota porque la ciudadanía ha hablado. Pero quienes lo dicen dan la imagen de que están poniendo el paraguas hasta que pase el chaparrón. Resulta curioso ver a personas tan poco capacitadas como Elena Valenciano u Óscar López comandando un barco encallado, cuyo capitán Rubalcaba ya resta más que suma. Decir que no es momento de traslucir críticas suena a escurrida de bulto por parte de los mismos de siempre.

Feijoo ha demostrado una gran habilidad adelantando las elecciones y aprovechando aún más la debilidad y falta de liderazgo en la oposición. Pero deberá advertir, que pese a su cómoda mayoría, esta legislatura tendrá en frente una oposición más débil, pero portavoces más fuertes, Beiras, y un Jorquera con años de experiencia en lides parlamentarias en Madrid.

Los Populares gallegos no debería caer en la auto complacencia tras su exultante victoria. Bien analizados los datos, han perdido voto, especialmente en las grandes ciudades, muchas de ellas además, con alcaldes populares al frente. Y esta pudiera ser la brecha en el fortín que atisbe la herida oposición.

Por último, se podría caer en la tentación, como ya están haciendo desde Génova, de afirmar que estos resultados legitiman la política de recortes del presidente Rajoy. Y nada más lejos de la realidad. Estas elecciones han sido un claro ejemplo, por muy diversos factores, de que se votó en clave gallega. Pero eso sí daría para un sesudo análisis.


12 de octubre de 2012

¡Por fin debates en Galicia! (Publicado en el periódico Santiagosiete)





Estos días mucho se me ha preguntado acerca de quién ha ganado los debates electorales que las gallegas y gallegos pudimos ver en nuestra televisión pública. Y sin duda alguna, el vencedor ha sido la democracia. Después de décadas sin poder ver un cara a cara, muchos se han sorprendido con los candidatos en estos debates. Han podido ver su capacidad para defender sus propuestas y poner en evidencia al contrario. Algo obvio que por ley debería estar obligado.

Y es que en los Estados Unidos, donde está totalmente asentada esta costumbre, incluso tienen su trascendencia electoral. De hecho, Romney está remontando en las encuestas gracias a su buen hacer en el primer debate norteamericano celebrado hace pocos días.

En el caso de los debates gallegos, es difícil que estos vayan a influir, primero porque nuestra realidad es diferente, y segundo porque considero que los tres candidatos han salido reforzados, si bien Feijoo, es el que mejor ha estado en líneas generales, ha ido bien preparado y documentado para defender sus ideas, y llevaba una estrategia más definida. Y a pesar de que la situación económica y de paro no le ayudaba, supo dar los mensajes que su electorado quería y necesitaba oír. Ha demostrado una vez más, su buena cintura dialéctica, sobre todo con el candidato nacionalista, que fue el que más le puso en apuros.

Pachi Vázquez también sale reforzado, si bien considero que no ganó ninguno de sus dos debates, en el primero sorprendió a muchos, tal vez por su serenidad frente a los nervios iniciales del presidente de la Xunta, y su mayor dominio de las emociones. No se esperaba que fuera a hacerlo bien, y por eso muchos le dieron ganador, al igual que a Romney, por el efecto sorpresa. Esto sin duda le refuerza, pero tan solo entre su electorado. Y en general le ayuda a mejorar el pobre carisma que de él se tenía hasta ahora.

Jorquera también ha sido una sorpresa, pese a su experiencia como diputado en Madrid, se le vio algo nervioso, pero muy convincente en su tono y en sus formas. Con Pachi logró marcar mejor el terreno y que este se adhiriera constantemente a sus propuestas, algo lógico ya que ambos no buscaban la confrontación, y por tanto tampoco asistimos a un debate real propiamente dicho. Con Feijoo, el candidato del BNG permitió que asistiéramos a un gran debate, tenso y dinámico, cuyo resultado muy igualado se debió en parte a que este acabó diciéndole a Feijoo, muchas cosas que la izquierda en general deseaba que alguien le dijera en persona. Su “Good night Sr. Feijoo” pasará a la breve historia de los debates de Galicia.



1 de octubre de 2012

21-O Elecciones gallegas, ¿Una tragedia griega?





Hay que reconocer que a medida que se aproxima el 21 de octubre, las elecciones gallegas están cogiendo, para sus protagonistas, tintes cada vez más trágicos, dignos del mismísimo Eurípides.

Ya nuestra historia, empezó de modo forzado por la imperiosa situación económica que le ha revestido a la campaña un aura de cierta excepcionalidad y urgencia, que intoxicó no solo a un apurado Feijoo, sino también a una oposición, ávida de proclamar a un candidato, los unos, y de conformar alianzas, los otros. Todo fueron prisas en una, a veces surrealista carrera de obstáculos, puestos por los propios compañeros de filas.

Muchos somos los que pensábamos que, debido a este desnorte de la oposición, todo parecía apuntar a que Feijoo tendría más que serias opciones de revalidar mandato. Es cierto que mucha gente está hastiada con la situación actual, y eso provoca que haya un aumento del voto protesta, pero la cuestión era concretar a dónde iría a parar ese voto protesta si en la oposición no se observaba ni se observa, una alternativa, un proyecto, y un líder claro.

Todo esto se trastocó cual tragedia griega. De repente, en cuanto uno pensaba que la trama tenía un horizonte de sucesos claro para nuestro héroe Feijoo…  Aparece Mario Conde, que si bien tiene casi imposible conseguir diputado en el Hórreo, desestabiliza las filas orensanas del PP y por primera vez desde que tengo uso de razón, abre una herida entre el electorado conservador. Nuestro héroe empieza a desangrarse ligeramente.

Nuestro protagonista, por primera vez se pone nervioso, y llama a filas a sus paisanos. De modo alterado, les alecciona a que no se dejen amedrentar en la batalla de las redes sociales. Empieza a mostrar debilidad, los rivales la huelen, y exigen al protagonista de nuestra tragedia a la gallega, enfrentarse a duelo, en un cara a cara televisivo donde la plebe pueda recrearse viéndolos pelear en singular lucha dialéctica. E inesperadamente, este acepta, necesita también la lucha para movilizar a sus filas. Parece que el final feliz le costará sangre sudor y lágrimas.

Y justo cuando una brisa de aire fresco enviada por los dioses aztecas de PEMEX, le insufla esperanza para la batalla, los dioses inexplicablemente montan en cólera, y deciden someter a todos los protagonistas a una lucha titánica frente a un poderoso enemigo común, el Pokémon.

Que la tragedia tendrá, valga la redundancia, un final trágico para alguno de los aspirantes a la Xunta es inevitable, está en el guión. Pero la salvación y el éxito de nuestros héroes dependerá en parte, de cómo gestionen este nuevo caso judicial pre electoral que parece salpicarles a casi todos.